Ya iba siendo hora de retomar algo de películas para el blog, y en especial sobre Primer. Una indecencia que el nombre del blog sea un homenaje a esa película y ya no hable. Parece que cambio mis referencias cada pocos minutos. Con una explicación nueva de la película de la que tuve conocimiento hace pocos meses, volvió a entrarme el gusanillo. Ya dije metafóricamente que Primer era como un libro de Aristóteles interpretado por algún erudito medieval: tenía todo el conocimiento del universo pero de manera dispersa, desordenada y a veces mal explicado. Inspirado en eso voy a relatar qué aspectos se identifican en esta obra maestra y que están encarnados por todos los personajes de la película.
Lauren es la pequeña hija de Aaron y Kara, es una niña normal, feliz y a gusto en su pequeño mundo. Solo le tiene miedo a que su padre la duche, quizás porque nota que tras las capas de ternura que envuelven el corazón de Aaron hay una semilla de egoísmo, de tal calibre que es capaz de abandonar a su familia con tal de conseguir lo que se propone. Lauren encarna la pureza y la inocencia. Aparece poco en el metraje y no tiene (evidentemente) ninguna línea de diálogo, pero es el símbolo de lo que es capaz de dejar Aaron por conseguir lo que desea.
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Publicado originalmente el 09-09-2011
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