El paso natural tras el viaje anterior fue intentar visitar más territorio. Aproveché que un matrimonio hizo buenas migas conmigo en el viaje de vuelta de las Cataratas y me plantearon que algún día los visitase a su pueblo. La idea era ver cómo viven en los pueblos poco habitados, algo así como la Argentina profunda. Pues bien, un sábado me levanté temprano, llevé la ropa a la lavandería, hice las compras y vi que no tenía ningún plan para el fin de semana. Así que llamé a Cacho (así se llamaba el hombre, Norma su mujer) y le pedí instrucciones.
Sí, un poco a la carrera, sin llevar muda ni cambio de ropa, ahí a la aventura. Tras llegar a la estación de autobuses Mariano Moreno cogí el primer bus que fuese a Gálvez, ahí me estaba esperando con un hijo suyo. En coche tardamos un poquito y llegamos a su pueblo, Santa Clara, bastante chiquito y tranquilo, unos 3000 habitantes. Tenía un hambre de película y me cebaron como un cerdo, todo bien regadito de vino, por lo que comenzaron mis borracheras viendo los Simpsons. Aparte del hijo, un buen chaval, tenía dos hijas más: una se quedó en Rosario y no la pude ver, otra estaba ahí y poca conversación me dió, aunque estaba bastante rica. El bueno de Cacho intentó rifarme a algunas muchachas del pueblo, jajaja tantas buenas sensaciones hice en aquel lugar. Norma también me hizo ver que ella sospechaba que entre la rubia francesa y yo podía haber algo, ya que observaron que con su novio no se tocaban y yo pasaba de la pelirroja. Ahí me entró la nostalgia.
Por la noche di una vuelta al pueblo (pocos minutos me faltaron para llevar a cabo esa misión) y Cacho llamó a sus amigos para comenzar un asado. ¡Qué panda de locos! La hija de uno estaba de novia con uno que juega en Colón, equipo de Santa Fe, y estuvieron todo la noche al pobre gastándole bromas y apoyando al equipo rival, Unión. Hubo cantos, bailes, disfraces, bebida, comida, bebida, chistes, bebida, así hasta altas horas. Al final todos me pillaron por banda y empezaron a preguntarme sobre la vida en España. Espero que no pensaran o esperasen que fuese el español modelo, o que mis opiniones son las opiniones medias de un español. No intento eso, sino dar mis respuestas y razonarlas.
Barrió todos y cada uno de los aspectos. Como hace tanto tiempo de eso y además no estaba muy sobrio, apenas me acuerdo, pero varió desde la informática hasta el Rey, pasando por temas de educación y nacionalidades (cómo no, pero ésa vez no saqué el tema). La gente terminó convencida y pidió que volviese alguna vez, cosa que prometí aunque hasta hoy no lo he cumplido.
Por la mañana dimos otro paseo por el pueblo, vi la plaza del pueblo, el coche hecho mierda de Cacho (tuvo un grave accidente pero afortunadamente no pasó nada), la antigua parada de la estación y el campo de fútbol. De vuelta a su casa a comer más y me metieron la costumbre de comer los domingos pasta. Al final creían que me quedaría una semana allí (jaja ¿y mi trabajo, qué? y que no tenía nada d ropa) y gracias a que Cacho pidió un favorcillo estuve de vuelta.
El punto negativo es que antes de irme sacó un antiguo atlas y estuve explicándoles cosas de España y dónde vivía. De eso no hay problema pero cuando comprendió dónde vivía y dónde estaban las cosas por visitar empezó a insinuarme que lo de la estancia lo hacían para que les devolviese el favor en España. Juego sucio, por cierto. Pero por mí que se vangan a Andalucía cuando quieran, la cosa es que allí vivo con mis padres y no sé si aceptan; o si esperaban que les llevase a todo punto del país, mucho dinero en gasolina aparte de que no tengo coche.
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Publicado originalmente el 06-10-2008
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