domingo, 11 de marzo de 2018

Diario de Viaje: Nerja (Agosto de 2016)

Pues no tengo claro cuál fue la primera vez que visité esta localidad, así que pongo la última. Esa primera vez poco visitamos y me dio cosa visitar por mi cuenta algo del pueblo. Eso sí, recuerdo haber ido hacia las famosas cuevas, pasando cerca del enorme Acueducto del Águila encajado en ese estrecho valle. Las cuevas son impresionantes, estalactitas y estalagmitas de un tamaño enorme. Sus salas enormes evocan como diferentes temáticas para la imaginación y si alguna vez acudo a un concierto ahí va a ser épico. Evidentemente, en mis dos visitas nada ha cambiado a excepción de las zonas ajardinadas previas a la cueva y cómo se organizan las entradas y salidas.

El pueblo es bastante bonito, con varias fuentes y plazas al estilo andaluz. Y es bueno que existan estos espacios abiertos para poder luchar contra el terrible verano. En ambas ocasiones pudimos recorrer las calles de la ciudad, típica casa pequeña blanquecina. La mayor parte de las calles llegan a la costa, que es el reclamo turístico del lugar por excelencia. Todo desemboca a un hermoso y cuidado Balcón de Europa, cuyas vistas son impresionantes y el sempiterno Alfonso XII no se cansa de admirarlas. Incluso me hice unas cuantas fotos con este referente mío.

Entre helados y refrescos para aguantar el inclemente sol pudimos bajar esta vez cerca del gran balcón a una pequeña caleta y darnos un chapuzón. Estuvo complicado porque había bañistas en gran cantidad. Entre rocas y sus paisajes ese mar atrae mucho más.

Es un lugar que siempre recomiendo de Málaga. Por favor, visitadla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Diario de Viaje: Peñafiel (Febrero de 2023)

 Pues casi sin reponernos del viaje navideño a Portugal tocó otro gran viaje. Mi mujer tuvo que ir a un curso a Santander y yo hacía décadas...