Por un evento organizado en parte por mi mujer tuve que desplazarme a esta localidad en plena Sagra. El viaje fue algo accidentado pero pudimos aparcar sanos y salvos. Un recorrido rápido por las decoradísimas casas bajas del lugar llenas de banderitas españolas y con muchos coches aparcados con remolques para caballos hasta la plaza del ayuntamiento. Allí la banda de música del pueblo tocó una fanfarria y se dirigió hacia el campo de fútbol con su paseo renovado con parquecitos.
En el campo al final tocó lo que esperaba, unas buenas migas para entrar en calor. Sinceramente me salté la parte central del acto, pronto enfilé por una calle hasta encontrar un largo sendero entre praderas llenas de cazadores con unas vistas a la sierra y los montes envidiables. Tocaba caminar un buen rato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario