lunes, 6 de octubre de 2014

Alfonso XII en Extremadura (2/2)

En los apuntes biográficos de Barrantes sobre Alfonso XII recopilados por el franciscano Enrique Escribano tenemos constancia que muchos de la comitiva no querían ir a Medellín pero al ser todo improvisado no pudieron poner muchas contras al proyecto, solo murmuraciones y quejas. Por suerte, todo lo exigido estaba ya preparado en Medellín: dos o tres coches, carros y caballerías en exceso. Alfonso XII salió corriendo del tren con mucho entusiasmo, siendo seguido por Cánovas y personal de Palacio, Oñate entre ellos. Peris Mencheta, el enviado especial de La Correspondencia no pudo subirse al pescante y se encaramó como pudo al carruaje, lo que hizo mucha gracia a Barrantes y al Rey, ya que cualquier movimiento en falso podía hacerle caer al oscilar como una lámpara. Silvela también pudo acomodarse, aunque muchos quedaron en la estación al ver que los carruajes no tenían la calidad y el porte que se esperaba para tales personalidades. Barrantes, debido a su pata de palo, también se quedó esperando.

La excusa fueron la premura del plan, pero muchos desearon quedarse en el tren en esa tarde nublada y frías. Los que paseaban por el andén al paso de las horas cambiaron a un muy mal humor. Y muchos lo pagaron con Barrantes, por supuesto. Entre ellos, el Duque de Sesto, animado por sus ayudantes. Le espetó a Barrantes que su 'extremeñismo' ridículo había puesto en peligro al Rey y al Gobierno y que era culpable de incitar a llevar a cabo proyectos temerarios a un muchacho tan temerario y loco. Sus ideas no creía que valiesen mucho, puesto que ni en Extremadura sabían quién era Hernán Cortés y tampoco dónde nació. Es más, Osorio le iba a otorgar toda la responsabilidad de lo que sucediese, ya fuese un accidente o un robo, puesto que la Guardia Civil no había tenido tiempo de ser avisada y apostarse en todo el camino.

Barrantes consideró a Alcañices como alguien poco monárquico y muy adulador y por eso no tomó en cuenta sus ataques, aunque la posibilidad de un accidente no era baja. Sin embargo, el Conde de Toreno salió en favor del cronista. Dijo que no era probable que esto fuese un peligro político, pues las empresas arriesgadas siempre salen bien y que si el Rey se acordaba de Hernán Cortés cuando no lo hacía ningún extremeño era cosa para loar aún más a Alfonso XII. Barrantes se envalentonó y recordó que el Gobierno estuvo de acuerdo con la excursión, luego ya no era su responsabilidad y que no necesitaba el Monarca ni el Gobierno su ayuda para defenderse.

Las preocupaciones desaparecieron cuando volvió la comitiva con un Alfonso XII satisfecho de la visita y a un atribulado cura del pueblo que no pudo apenas prepararse para la visita real. Tanto que no podía hablar y lo solucionaba poniéndose de rodillas. El Rey comentó con diversión que el otro carro se había atascado y no podía moverse, por lo que Silvela tuvo que hacer el camino de vuelta a pie. El tren le esperó y todo gritaron al orondo y achacoso Ministro de Estado con su frac embarrado. Incluso el Rey siguió la broma diciendo que el tren estaba parado por culpa de su falta de piernas.

Barrantes pudo comunicarle al Rey sobre los ataques de José Osorio, pero Alfonso XII dijo que había que quitar hierro al asunto: había comprendido, junto a Cánovas, la importancia del consejo de Barrantes y se lo agradecía ampliamente.

Ya en 1883 volvieron a encontrarse Barrantes y el Rey tras la nominación del primero como Gobernador Civil en Manila. Alfonso XII felicitó por la elección a Sagasta y Núñez de Arce y dijo que tal nombramiento honraba al Gobierno que había tenido la idea. Barrantes fue a despedirse personalmente del Rey y este lo trató con sumo cariño, incluso saliendo a la antecámara para que la pata de palo de Barrantes no tuviera que enfrentarse contra el resbaladizo mármol. Incluso llamó a la reina María Cristina para presentárselo. Barrantes, en un gesto de cortesía, le pidió instrucciones al Rey para su próximo destino, a lo que él contestó:

-Mejor sabe usted que yo lo que tiene que hacer en Manila.

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