lunes, 10 de octubre de 2011

Moon

En un futuro cercano la Tierra se salva de una destrucción segura provocada por la escasez de recursos naturales, las guerras provocadas por conseguirlos y la atenazante contaminación. Gracias al mayor descubrimiento de la historia de la humanidad, la obtención de helio 3 en la cara oculta de la Luna. Los vientos solares impactan con las burbujas de helio atrapadas en las rocas lunares y provocan una reacción nuclear que da lugar a este isótopo. Los seres humanos entonces sólo tienen que barrer zonas de la cara oculta y extraer el He3 pa enviarlo a la Tierra para su uso. Es la energía más rentable, barata, limpia y eficaz que se conoce. Lunar Industries es la encargada de colocar una base lunar permanente y barrer el suelo mediante cosechadoras robotizadas, de tal manera que sólo sea necesario un operario para controlar el proceso. Éste es Sam Bell, un astronauta que lleva ya tres años en la base y que cuenta los pocos días que le quedan para volver a la Tierra junto a su esposa e hija. Junto con el robot Gerty controlan el buen funcionamiento de las cosechadoras y el envío periódico de helio 3 a la Tierra. Desgraciadamente, el satélite de comunicaciones está averiado, por lo que le es imposible contactar con su familia en tiempo real (bueno con dos segundos de retardo por ir y volver la señal y estar separados por casi 300000 km), así que vive gracias a grabaciones enviadas a un satélite orbital posicionado en Júpiter. Estos problemas técnicos y las ganas de marcharse harán que se impaciente y empiece a imaginar cosas, teniendo incluso un grave accidente. Lo que no esperaría nunca Sam Bell es que tras recuperarse encontrase a otro inquilino en la base lunar, ¡él mismo!

Los problemas energéticos terrestres se nos relatan al principio de la película en una imagen a anuncio publicitario de Lunar Industries, pasando inmediatamente a lo que sería un día en la vida de Sam Bell, anodina y repetitiva pero al menos amenizada por Gerty y las operaciones de mantenimiento. Ciertos detalles se nos presentan ya al comienzo de la película para empezar a comprender que tres años de aislamiento logran que veamos y sintamos cosas que no existen.

No es que sea el no va más, pero la cinta de 2009 es un nuevo aire fresco a la ciencia-ficción. Una vuelta a sus raíces. Es una película que da a entender que un argumento sencillo con tintes científicos siguen enganchando al espectador y que no es necesaria la aparición de una batalla estelar entre naves hiperlumínicas o la aparición de bellas y hermosas mujeres con trajes insinuantes. Un elenco reducidísimo, una tecnología perfectamente imaginable y hasta inmediata heredera de la actual y un enigma permanente en todo el metraje hacen que uno pase un buen rato y la suba a la cabecera de películas de visión obligatoria en el género de ciencia-ficción.

-

Publicado originalmente el 06-07-2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Diario de Viaje: Peñafiel (Febrero de 2023)

 Pues casi sin reponernos del viaje navideño a Portugal tocó otro gran viaje. Mi mujer tuvo que ir a un curso a Santander y yo hacía décadas...